sábado, 13 de febrero de 2016

Para mi para siempre más antigüo...



Nunca olvidaré lo que hubo entre nosotros,
Conocerte me llevó a ser honesto conmigo mismo.

Nunca olvidaré lo que creaste en mí,
Pues tú mejor que nadie viste lo mejor en mí.

Siempre me creí diferente,
Pero nunca fue tan cierto hasta que te tuve en mí.

Pensé que era una maldción,
Sin embargo todo lo que fue era el despertar de un amor.

Llegaste a mí en el peor momento,
Y nunca supe darte el valor que merecías.

Nunca quise que te fueses de mí,
Pero jamás perteneciste aquí.

El karma llegó a imponer su lección,
Yo debía aprender el daño que te había causado,
Pensé que tal vez la soledad sería el precio,
Pero como de amor se trató...
...el dolor fué el precio de mi error.


Te quisé y no lo supe demostrar,
Me quisiste y no lo supe valorar,
Solo el tiempo me supo enseñar,
La pesadilla de volver a amar.

Crecí, volví a amar y me dejaron cicatrices,
Amé,
Sufrí,
Dándome cuenta de lo imbécil que fuí.

Pasaron años.
Es obvio saber que el tiempo no se detiene,
Y no lo hará,
Aún menos volver a atrás.

Recuerdo como mi corazón se detenía al verte cada día,
Se que también lo sentías,
Tal vez fue real nuestra fantasía.

Sé con certeza que sin importar el tiempo,
las personas,
las circunstancias.
Al mirarnos otra vez,
Se nos detendra la vida.

Nunca negaré,
Lo qué sentiré,
El día que te vuelva a ver,
No es igual al primer día que te besé.

Apuesto que has estado con mejores personas,
Pero ninguna de ellas podrá recrear lo que hubo,
En nuestro pequeño infinito para siempre.

Porque sé que tú también lo sientes.
Nuestro pequeño secreto.
Nuestro para siempre.

sábado, 6 de febrero de 2016

Perdonar

Perdonar, suena tan fácil decirlo y es tan duro hacerlo, son tan abstractos los polos de la palabra ya que engloban la culpa y la decepción, no comprendemos lo que sucede para sanar una herida o para curarla, pensamos que hemos perdonado cuando ya no sientes el dolor de lo que ha sucedido pero al referirnos a la persona no nos damos cuenta del veneno que soltamos tal vez sin querer, pensamos que hemos dejado ir el rencor y el peso pero no es tan sencillo, todos tenemos heridas que tardan muchisimo tiempo en sanar y otras que simplemente no sanan, no somos la excepción.

Creí haberte perdonado porque no tengo opción, no puedo no hacerlo, no a ti, porque eres lo más grande que tengo y lo que algún día ya no tendré y aunque no lo aparente siempre antes de hacer las cosas, las pienso muchísimo y la razón de mi comportamiento hacía ti es porque no te he perdonado, porque con lo material nunca sanarás un corazón, crees saberlo todo pero nunca te has preocupado por ayudarme a liberar todo el resentimiento que año tras año sigo acumulando, sé que lo ocurrido fue hace muchos años pero te necesitaba y no estuviste, tenías razones importantes lo sé, pero yo también era una razón importante y nunca comprendiste lo mucho que sufrí por ello, nunca fuiste tras mi silencio.

Muchas veces intento cambiar de parecer, como dicen "el pasado pisado" pero no es tan sencillo, intentamos hablarlo sin embargo mis lagrimas nunca definieron lo que pasé, son cosas que nunca sabrás como se sienten hasta que las vives, por supuesto no desearía jamás que te ocurra algo parecido porque a pesar de ello se qué moriría si te sucediese algo.

No somos perfectos lo sé, pero te llenas la boca diciendo que das oportunidades para cambiar aunque tu nunca notas que te pongo a prueba para cambiar, ya que por supuesto hay cosas más importantes en las que pensar, duele, ¿sabes? no, nunca lo sabrás pero no es porque no te lo digan sino porque siempre te niegas a escuchar, de la misma manera en la que hace unos años te negaste a ver.